Los daños causados por los efectos del clima son el principal motivo que impulsa una reforma de fachadas, además de la pérdida de propiedades, en lo que refiere a la resistencia de los materiales o el deseo de dar una mejor apariencia.
En este orden de ideas, esta reforma agrega valor a la edificación, para lo que se deben considerar varios aspectos. En principio, es elemental la selección de materiales de la mejor calidad, que garanticen un trabajo de calidad, al mismo tiempo que una apariencia atractiva y duradera.
Quiere decir, que se puede aprovechar la reforma de la fachada, de manera que aumente sus funcionalidades y evaluar la incorporación de elementos decorativos para embellecer la propiedad.
Cabe mencionar que es indispensable la contratación de una empresa capacitada, de preferencia, con experiencia y referencias comprobables, para tener una garantía que la obra se ejecute de acuerdo al diseño y los planos presentados.
Es importante tener en cuenta que para estas obras se deben tramitar los permisos y licencias, ante el Ayuntamiento o la Comunidad Autónoma que corresponda a la localidad donde esté ubicado el inmueble.
En estos casos se debe entregar la documentación requerida, pagar las tasas correspondientes, de acuerdo con el tamaño de la obra y otras particularidades, interesantes, como por ejemplo, la necesidad de uso de andamios.
Luego de consignados todos los recaudos, debe esperarse, de forma obligatoria, la aprobación de la obra, antes de dar inicio a la misma.
Ventajas de reformar la fachada de los inmuebles
Las fachadas son una de las partes más significativas de un inmueble, ya que no solo proporcionan una buena estética, sino que ayudan a proteger la estructura de los elementos externos y traen consigo indudables ventajas, como:
- Mejorar la eficiencia energética,
- Aumentar en alto grado la apariencia y estética del edificio.
- Se incrementa de manera notable el valor del inmueble en el marco del mercado inmobiliario.
- Se corrigen las fallas en la estructura que con frecuencia son ocasionadas por la ausencia del adecuado mantenimiento periódico.
Técnicas empleadas en la reforma de la fachada
Estas técnicas se adaptan a las necesidades específicas del inmueble, donde se va a ejecutar la remodelación. En tal sentido, la empresa encargada de la obra ofrece sus recomendaciones profesionales. En todo caso, las técnicas más frecuentes son:
Enfoscado
Se trata de una técnica muy económica, que consiste en aplicar cemento sobre el revestimiento de las paredes. Sin embargo, se debe acotar que cuenta con una desventaja importante que se deteriora con rapidez, por lo que exige un constante mantenimiento.
Enfoscado mono capa
En este caso, utiliza una sola capa de mortero en el revestimiento. Esta capa contiene cemento, aditivos, y otros agregados que sirven para reforzar las propiedades de aislamiento. Para mayor comodidad se pueden adquirir en una variada gama, tanto de colores, como de texturas.
Fachadas ventiladas
En este caso, es un sistema constructivo que consiste en aplicar una capa exterior de revestimiento, conjuntamente con una cámara de aire ventilada y un aislamiento térmico. Este último situado entre la estructura de soporte y el cerramiento exterior.
Con esta técnica se alcanza una mayor eficiencia energética, al reducir el consumo de climatización. De manera adicional proporciona mayor durabilidad y protección al edificio. Como beneficio adicional, estas fachadas ventiladas brindan variedad de posibilidades para mejorar la estética del inmueble.
Sistema SATE
Estas son las siglas del Sistema de Aislamiento Térmico Exterior, en la actualidad considerada la mejor opción, gracias a su excelente calidad y a bajo coste.
Dentro de los beneficios que ofrece combina la impermeabilización, con un notable ahorro energético y mejora el aspecto estético de la fachada. Es un empleo de un material aislante térmico, acústico, con un revestimiento de acabado decorativo.
Por otra parte, aumenta la sensación de confort de los residentes. Todas estas ventajas se aplican tanto en edificios nuevos, como en los de vieja data.
En resumen, una reforma de fachada agrega valor a una propiedad si se realiza de manera apropiada. Para lograrlo, se deben considerar factores como la calidad de los materiales y la contratación de una empresa especializada.
Las técnicas empleadas en la reforma de la fachada pueden variar dependiendo del tipo de edificio y de los materiales utilizados, pero de manera regular estas técnicas comunes incluyen enfoscado con mortero hidrófugo y el SATE o Sistema de Aislamiento Térmico Exterior.
Vale decir, que es necesario acudir a expertos, que realicen la evaluación y ejecuten una reforma que combine el aislamiento térmico y acústico con el factor estético y lo funcional.
